La liberación de las conciencias debe de ser una a una, mente por mente. No es recomendable hacerla perteneciendo a colectivos u organizaciones como “Yo soy 132” o “Morena”. Porque estas asociaciones o son creadas por el mismo status quo, para controlar a la oposicipon dirigiendola, o terminan siendo infiltradas por el gobierno o por grupos interesados en imponer su propia agenda.
Nadie es tu líder, tú eres el responsable último de tu liberación de la prisión dogmática en que te encuentres.
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