El sitios de noticias independiente WhatReallyHappened.com publica que las secretarías de Hacienda de varios países se valen del uso de Google Maps para ver que tanta riqueza se ostenta, cambios hechos a la propiedad, número de vehículos, etc., con tal de decidir si uno está pagando pocos impuestos.
Malditos agentes de las banca privada que nos cobran impuestos para pagar la deuda pública del gobierno al que se le imprime dinero en forma de deuda pública, y malditos los de Google.
En sus nuevos términos de privacidad, Google, ya ha matado la privacidad en internet, exige un perfil público con fotografía, al que se asocie el nombre real, número de teléfono celular y tarjeta de crédito “para sí tener una mejor experiencia al usar los servicios Google en internet.”
Y desde luego los datos de uno los comparte con empresas y con los gobiernos, que así intimidan a voces de inconformidad.
Dejemos de usar Google.
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